30.000 personas a tu alrededor, otros 2 millones animándote y de fondo la Estatua de la Libertad. Por delante, metros de asfalto para correr y la capital del mundo como testigo. Bienvenidos a la Maratón de Nueva York, bienvenidos al “American Way of life”.

Desde 1970, Nueva York abre los brazos a aquellos runners que deseen aceptar el reto de atravesar los 5 barrios que conforman la ciudad desde Staten Island a Manhattan, en uno de los mayores eventos deportivos del mundo.

Además, como siempre en EE.UU. saben “monetizar” cualquier evento y la prueba tiene un impacto económico en la ciudad de más de 340 millones de dólares de los cuales, el 10% está destinado a obras de caridad. Otra buena razón para participar.

Preparativos

Desde la organización destacan algunos aspectos clave para la carrera que todo buen runner debe tener en cuenta como el transporte hasta la salida, el material deportivo que se va a llevar ese día o el entrenamiento. Si quieres participar, te conviene anticipar muchos temas para evitar las aglomeraciones o cargar con equipaje en exceso que dificulte el rendimiento.

Pero Nueva York es además una ciudad apasionada por el deporte, y por ello son muchos los lugares donde poderlos practicar y entrenar.

Disfrutan del fútbol americano, del béisbol, baloncesto, hockey, soccer y las carreras a pie. Nueva York siempre te presta un momento del día para realizar ejercicio.

Y como se le ha llamado muchas veces es una coctelera mundial. Nueva York no entiende de razas, religiones ni edad; en definitiva, no tiene prejuicios.

Una ciudad que avanza con la cabeza alta sobre las raíces de su pasado, en la vida presente y con los ojos puestos en un futuro grande.

Todo salpica sus calles, edificios y ciudadanos. Parte de su encanto está en su ritmo caótico agotador y llena de actividad.

Nueva York una ciudad que nunca duerme y que ha sabido reinventarse continuamente nos abre sus puertas y nos invita a descubrir la experiencia de vivirla.